EL CONSEJO DE
LOS RATONES
En un determinado lugar
había un gato que era el terror de los ratones. No les dejaba vivir ni un
instante. Les perseguía de día y de noche, de manera que los pobres animales no
podían respirar tranquilos.
Como los ratones veían
que cada día desaparecían varios ratones en las garras del malvado gato,
decidieron hacer un consejo para estudiar el caso y buscar entre todos una
solución al problema.
Una noche oscura, se
reunieron en el lugar convenido todos los ratones de la vecindad. Después de
saludarse cordialmente, pues el peligro hace que la gente se vuelva más amable,
comenzó la asamblea.
Pasaron varias horas
discutiendo, pero no llegaron a ningún acuerdo.
Entonces, un ratón se levantó
pidiendo silencio. Todos se callaron y escucharon con atención la propuesta:
- Creo; que lo mejor
sería atar un cascabel al cuello del gato, para que cada vez que se acerque a
nosotros podamos oírle a tiempo, para poder escapar.
Los ratones se entusiasmados
ante la idea, saltaron y abrazaron al que la había propuesto, como si fuera un
héroe.
En cuanto se calmaron,
el mismo ratón que había hecho la propuesta pidió de nuevo silencio y preguntó
solemnemente:
- ¿Y quién le pone el
cascabel al gato?
Al oír estas palabras,
los ratones se miraron unos a otros confusos…y empezaron a dar excusas:
- Yo no sé hacerlo.
- Yo soy muy torpe y me
caería.
- Yo me voy de
viaje……..
Y uno a uno se
marchando a sus casas sin dar ninguna solución al problema del gato.
Moraleja. Es muy fácil proponer soluciones, lo difícil
es ponerlas en práctica.
Ahora responde a
las siguientes preguntas:
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