Una gaviota,
desde la altura, vio de pronto cómo el muro del puerto estaba a punto de
derrumbarse.
Chillando con
todas sus fuerzas, la gaviota, comenzó a revolotear alrededor de un pescador
que allí había, tratando de llamar su atención. José no se daba cuenta de lo que
quería decirle y siguió pescando. El ave voló hacia nuestro amigo y le arrebató
el sombrero.
José se
levantó y se fue detrás de ella. Cuando se alejaron del muro, la gaviota dejó
caer el sombrero. José lo recogió de muy mal humor, regresando luego a su lugar
de pesca. Al llegar, descubrió que el
muro se había derrumbado.
Comprendió
entonces el comportamiento de la gaviota: Quitándole el sombrero había querido
alejarlo del muro.
Lee y responde...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario